«Deberías intentar adaptarte un poco al mundo que te rodea, y no pretender cambiarlo para que él se adapte a ti. Eres muy poco flexible.»
Sinceramente… No. No quiero adaptarme ni una pizca al mundo que me rodea. Es feo y horrible. Adaptarme implicaría perder parte de mi esencia, y me gusta mi mundo, el que yo creo cada día: me gusta su color, su estética, sus valores, me gusta que se dé importancia a (¡OH!) lo que realmente es importante, y sobre todo me gusta porque es bonito y tiene CUPCAKES. Te transmite sensaciones positivas, intelectuales, dulces, originales. No es vacío y banal, no es soez y vulgar. Es elegante y cute.
Así que… NO. No voy a adaptarme a un mundo que me transmite emociones tan feas y que promueve pautas tan desagradables, me quedo en mi precioso mundo, luchando con mi vestido de lazos e intentando cada día transmitir lo mejor de él al exterior.
…Y si alguien quiere entrar es más que bienvenido a hacerle una agradable visita (y si gusta, quedarse cuanto quiera). ¡Le invitaré a té y galletas!
~Eve (Ribosoma)
Cogitación meditabunda 